Un libro del siglo XVI rezaba: "los magos dicen que si una persona se frota a sí misma con un diente de león será bienvenido en todas partes y obtendrá lo que desee".

martes, 10 de junio de 2014

ANNIE HALL (Luis Ramiro)





Me recuerda el primer libro de poemas que compré,
 Anoche soñé que volvía a Manderley,
 y a mi primer beso...



 
Camino de noche por las calles.
Parece Nueva York, pero es Madrid.

Si yo fuera Al Pacino
seguramente tú estarías aquí.
Me falta un buen Padrino
y el valor para decirte: “Ya no soy feliz”.

Este guión absurdo no lo he escrito yo.
No soy Woody Allen, ni tú Annie Hall.
Me faltan gafas grandes
 y volar a Los Angeles sólo por amor.

Sólo por amor,
igual que un buen actor.
No tengo tanta clase
y me faltan clases de interpretación.

Confundo Manhattan con mi barrio:
¿será el Empire State o el Pirulí?
Si yo fuera De Niro
 te haría una llamada desde aquí.
Tendría un buen motivo
y las palabras para hacerte sonreír,

pero el plano fijo
no es tu cuerpo en mi colchón,
falta el Barrio chino,
un callejón
cubierto de humo blanco,
y en el puerto algún barco
 para escapar los dos.


A este final le falta brillo
y emoción,
un taxi amarillo,
una persecución,
tú y yo bajo la lluvia
arañando la luna sólo por amor,

Sólo por amor.

Sería un gran guión.
Me falla el personaje
y me faltan clases
de interpretación,

de interpretación.

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